Casa Imperial Corrino o Casa Corrino era una familia noble en la serie de novelas de Dune, del escritor estadounidense Frank Herbert. La antigua casa Butler (que dio nombre a la Yihad Butleriana), cambia su nombre tras el último enfrentamiento, la Batalla de Corrin, en que los humanos lograron vencer a las máquinas que los esclavizaban. El jefe de la Casa Corrino era al mismo tiempo el Emperador del Universo Conocido, que ocupaba el llamado Trono del León de Oro. Su guardia personal eran los Sardaukar.
Las restantes Grandes Casas rendían tributo, como Emperador, a la Casa Corrino.El último de los Corrino muere a manos de una Habladora Pez por orden del Dios Emperador Leto II
Emperador Padishah
El último emperador Padishah, fue Shaddam IV, quien cayó derrotado en la Batalla de Arrakeen, por el nuevo Emperador, Paul Atreides, dando paso a la Dinastía Atreides en el trono del León Dorado, y trasladó la capital a Arrakeen, capital planetaria de Arrakis, o Dune.
La Batalla de Corrin
La Batalla de Corrin es un evento importante en la historia del universo ficticio creado por Frank Herbert en su serie de novelas Dune. Según los apéndices del primer libro de la Saga, es la «batalla espacial de la cual tomó su nombre la Casa Imperial de los Corrino. La batalla, librada en las inmediaciones de Sigma Draconis en el año 88 B.G., determinó la subida al poder de la Casa reinante en Salusa Secundus» (Herbert, F.; Terminología del Imperio, en Dune; Ultramar Editores, 1982).
Sin embargo, Frank Herbert sólo hace alusiones más o menos vagas que no permiten conocer el desarrollo exacto del hecho. En el año 2004, el hijo del autor, Brian Herbert, publicó un libro titulado La batalla de Corrin, en que se narra con detalle el combate y los hechos que se relacionan con él.
Esta Batalla es librada entre «Las Máquinas» o seres de inteligencia artificial, y los humanos. Otros personajes mencionados en el libro son los «Cimek» o robots con cerebro de humano y los Titanes ambos comparten el cerebro y la originalidad de una personalidad humana. Los titanes originales fueron los autores intelectuales de la destrucción del Imperio Antiguo.